El contenido desechable, que no se queda en la red es ahora la moda. En vez de utilizar millones de Gigabytes, Terabytes, Exabytes y/o Petabytes (1, 000,000 Gigabytes) en almacenamiento de selfies, fotos de hamburguesas, videos de personas saludando a otras personas por su celular (el típico LIVE de Instagram dónde tu contacto lo único que hace es mirar la pantalla y decir “hola fulano, ¿cómo tu ta?” y no aporta absolutamente nada extraordinario (ni siquiera ordinario) en esos 10 segundos que acabas de perder en tu vida. Ahora, los expertos dicen que el giro para el 2017 de las plataformas se concentra en algo muy peculiar.
He hablado con personas que están concentrando todo su contenido en una sola app, Instagram por ejemplo. Porque es la única red que los atrapa. He oído y leído a otros de mi edad que están a punto de tirar la toalla. ¿Será que tanta tecnología y “avances” en la plataforma ya nos tienen medio “jartos”? Mira lo nuevo que trae Facebook…
Este post es el resumen de varias informaciones que se me han cruzado durante las pasadas semanas. Es un post que complementa un poco el pasado de adicción al celular, pero ya aplicado un poco a las parejas. Y lo que encontré es súper interesante y aprendí terminología nueva para la era romántica digital.
Blackberry que en estos días anunció que ya no va a hacer más smartphones, nos dejó un súper legado. Mas allá del chisme del origen de su nombre, nos presentó un nuevo paradigma social que Android y iOS han perfeccionado, una súper dependencia al celular. Tanto así que ahora empieza una tendencia a la desconexión o mejor dicho, un mejor uso de los aparatos móviles y el Internet en general. Aquí dejo señales claras de adicción y posibles acciones a tomar. Súper puntual y fácil de entender, (al grano cómo dijo el Dermatólogo)…
El caso de Sonia Mateo y su botellita de agua: Creo que hemos avanzado. Al principio de la era de las “redes sociales”, dábamos los buenos días (aún lo hacemos), el “buen provecho” (aún se hace) y las “buenas noches” (no tanto como los buenos dias). Pero hemos empezado a ver que las mentes creativas se están “tímidamente” asomando a través del contenido de algunas marcas y para muestra “un botón” que ocurrió esta semana. Aquí un poco del backstory:
El mundo de las redes sociales y el mercadeo digital en general se mueve a un ritmo que a veces le dan ganas a uno a mandarse a cambiar a la Conchinchina y desconectarse por un buen rato. ¡Pero no se puede! Gracias al WhatsApp y la tonelada de amigos early adopters que uno tiene uno siempre se termina de enterarse de la última teleserie digital entre plataformas. En estos días le tocó a Instagram y la “Fortaleza de la Soledad” más reciente de los millennials, Snapchat.