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Blackberry que en estos días anunció que ya no va a hacer más smartphones, nos dejó un súper legado.  Mas allá del chisme del origen de su nombre, nos presentó un nuevo paradigma social que Android y iOS han perfeccionado, una súper dependencia al celular. Tanto así que ahora empieza una tendencia a la desconexión o mejor dicho, un mejor uso de los aparatos móviles y el Internet en general. Aquí dejo señales claras de adicción y posibles acciones a tomar. Súper puntual y fácil de entender, (al grano cómo dijo el Dermatólogo)…

Todos lo hemos visto, un grupo de amigos sentado en algún café o bar en happy hour y todos mirando su celular en vez de estar hablándose entre sí. Y podemos asegurar con un alto nivel de confianza de que mientras más jóvenes son, más probabilidades tienen de tener este comportamiento.

Pero en la realidad, la edad tiene que ver pero no tanto en este nuevo fenómeno del comportamiento humano, (porque tiene un nombre).  La razón de ser de estar mirando tu celular cada 10 segundos se llama FOMO (Fear of Missing Out – Miedo de perderse algo). De hecho, ya vemos restaurantes que ofrecen descuentos para clientes que no llevan el móvil a su mesa y también hay reuniones «celular-free«, («Disculpa que no te tomé la llamada pero estaba en una reunión y están prohibidos los celulares«, ¿no te lo han dicho ya?)

«Un estudio publicado en el Journal of Social and Clinical Psychology concluyó que, después de salir de Facebook, el estado anímico de la persona es depresivo (que no quiere decir que cause depresión) y que cuanto más tiempo pasa conectada a Facebook, más se acentúa este estado.»  –Fuente

Hay algunos que alegan que la tecnología no afecta el comportamiento humano, que no cambia lo que esencialmente somos. Hay personas que ya están hablando de adicción al celular, adicción a las redes sociales e incluso nuevos comportamientos relacionados con la tecnología móvil. ¿No cambia el comportamiento? Puede ser que la esencia sea la misma, pero el comportamiento humano está en constante evolución.

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Tanto así que ahora existe el «phubbing«, el hecho de ignorar a alguien mientras estás embelesado con tu teléfono celular (es una mezcla de «phone» y «snubbing» o desaire). Y también está el «Nomofobia» (no mobile phone phobia), o  dicho de forma «aplatanada» ese sentimiento gutural que te da cuando te das cuenta que saliste de tu casa sin tu celular. (Normalmente va acompañado con un «cooooooooño, se me quedó el celular en casa, ¿y ahora qué hago?)

En fin, aquí tengo una pequeña lista de comportamientos tipo «alerta roja». Si te identificas con más de cinco de ellos, no dejes de leer la última parte de esta entrada.

Podrías tener un problema de adicción si:

  1. Te despiertas y lo primero que haces es coger tu celular de la mesita de noche (claro, para «ver que hora es»).
  2. Usas tu celular mientras estás al baño, tomas llamadas mientras estás «en el trono«. Y más encima te enojas porque tu WIFI no entra muy bien en el baño.
  3. Usas tu celular mientras te cepillas los dientes (ojo, no es igual a «estar en el baño» porque implica algún grado de ambidiestralidad).
  4. Tienes un pestaña en tu navegador con todas tus recetas preferidas. Y tu celular está en la cocina contigo mientras estás cocinando, «para no perderte nada«.
  5. Chequeas tu teléfono en los semáforos mientras estás manejando.
  6. Tienes tu celular en un bolsillo y «juras por Dios» que te vibró (pero mentira, nunca vibro, todo está en tu mente).  También conocido como «vibración fantasma«, producto de la hipervigilancia.
  7. Te molestas porque estás escribiendo un Whatsapp y te entra una llamada y te interrumpe (una de mis favoritas).
  8. Te pillas diciendo muchas veces, «no importa, cualquier cosa le pregunto al Sr. Google».  «Algunos expertos aseguran que el Internet está afectando a la memoria de las personas porque cada vez se necesita traspasar menos información desde la memoria a corto plazo a la de largo plazo.» – Fuente
  9. Textear mientras estás manejando (muy grave).
  10. Salir de casa sin tu teléfono es sinónimo de un ataque fulminante al miocardio.
  11. Subes una foto y si no le comienzan a dar like» te entra una urticaria y empiezas a pensar «estos tontos no saben lo que es buen contenido«.
  12. Para recordar qué fue lo que comiste ayer, revisas tu cuenta de Instagram.
  13. Te duelen lo bíceps (no por la rutina del gimnasio), sino por estar haciendo «snaps» y «selfies» todo el día.
  14. Revisas tu celular más de 30 veces al día (anda, haz el ejercicio, contabilízalo).
  15. Tienes menos de 20% de batería y empiezas a sudar y desesperadamente a mirar las paredes buscando un enchufe.

Ñapa:  Tienes más de 10 grupos en Whatsapp (todos en silencio, obvio). Cuando agarras tu telefono tienes 300 mensajes pendientes de ver… tienes (porque es tu obligación digital) de responder o meter la cuchara en caaaada uno de las conversaciones.

«Si Facebook fuera planeta sería como Marte. Se sospecha que tiene vida inteligente pero no está comprobado.» – Anónimo

 

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Pues si te identificaste con más de cinco de estas 15 señales pues aquí va otra lista para que te cures en salud:

  1. Empieza tu día sin tu celular. Por lo menos por los primeros 30 minutos. Café, periódico y una rutina habitual de ejercicios y/o estiramientos matutinos te ayudará a empezar el día de forma positiva.
  2. Pon horarios para el uso del Internet y celular. Tal como deberías tener un horario específico para revisar tu correo electrónico (hint hint), deberías tener un horario específico para revisar tus cuentas de redes sociales. Estar abierto a revisarlos en cualquier momento es una conducta poca productiva. No revisar tu teléfono constantemente durante horas de trabajo evita tener distracciones.
  3. Corta la data mientras manejas. Si sabes donde vas y no necesitas tener una app como Waze que te indique por dónde ir, es recomendable cortar la data de tu teléfono celular y no tener distracción alguna mientras manejas. Para mí, es simple sentido común, pero ya sabemos lo que dicen del «sentido común«.
  4. ¿Alguien te está hablando? Préstale atención. Pon la pantalla hacía abajo. Válido para reuniones, capacitaciones, citas, etc… No hay nada como el contacto visual. 🙂
  5. 6-8 horas de sueño al día. Eso es no-negociable. ¿Conectado hasta la quimbamba revisando si te dan likes a tus fotos? Suelta el mundo en banda y duerme. ¿Sabes que es bueno tener en la cama? Un buen libro y un celular apagado (especialmente con tantas baterías explotando).

Si encuentras que necesitas más ayuda, la ironía del mundo digital te ofrece apps que te dirán qué tan adicto eres a tu redes y tu móvil. Aquí una pequeña lista:

  • Checky.  Este app te hace un diagnostico y te informa tu uso en tiempo real.
  • Quality Time. Sabrás por cuánto tiempo usas tu celular y en qué lo estás usando. Hay un modo de «descanso» que te bloquea el celular.
  • BreakFree.  Monitorea tu uso en tiempo real además de graficar tu uso.  Bloquea apps específicas para esos momentos donde no quieres ser molestado.
  • Forest. Esta app plantas «semillas virtuales» que crecen cuando no estás usando cierto apps. Si empiezas a usar las «apps prohibidas» la planta empieza a morir. Si tienes paciencia, tendrás bosques y animalitos corriendo a través de él. Algo así como un «Farmville» pero con el objetivo de no usar el celular.
  • IF by IFTTT.  Automatiza tareas con la fórmula “si es A, entonces haz B”. Así puedes creas una acción automatizada que hace cosas por ti, sin tener que estar pendiente al teléfono.

Ahora, yo soy el primer culpable, pero tomando en cuenta los famosos programas de 12 pasos, la primera etapa siempre será el hecho de reconocer que existe esta dependencia. Cuando tomo la decisión de no fijarme en mi celular cuando hablo con alguien (o cuando me están hablando) o apagarlo en la noche para dormir mejor, yo me estoy empoderando y tomando el control de la situación.

Y eso es un gran avance. Me gustaría leer sus comentarios sobre el tema. ¿Qué otros comportamientos podría delatar una dependencia del móvil? ¿Qué otras soluciones podrías sugerir para depender menos de la tecnología (sea móvil o redes sociales)

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