Cuando hago mis clases siempre cuento una anécdota. Es cuando mi Samsung S5 decidió un día que ya…era suficiente. Que ya no daba más. Este amo negrero (o sea yo) ya era too much para él y decidió hacerse un harakiri digital, una puesta voluntaria de pijama de madera que se tradujo en una falla de litio. Literalmente hablando. Te explico más…